MI HISTORIA... de la mano del Deporte.

Venezolano. Nací y crecí en un Barrio Popular de la Ciudad de Los Teques, en el Estado Miranda. Donde jugar en la calle con los amigos era algo cotidiano, y hacer deporte, nuestra rutina diaria.

"Caimaneras" es el término coloquial con que se conocen en Venezuela esos improvisados encuentros deportivos en que los jóvenes toman la plaza, la calle, la acera, los estacionamientos ó cualquier espacio baldío que asemeje una cancha. Así que, como todo muchacho promedio, me inicié jugando sólo como esparcimiento.

Para 1981 ya jugaba Soccer (Fútbol Sala) y competíamos en juegos inter barrios. Recuerdo que siempre éramos los más pequeños del campeonato; una noche, en un juego nos tocó competir contra el equipo más fuerte, el favorito -para que se hagan una idea, nuestro equipo se llamaba LAS TORTUGUITAS, no sé a quién se le ocurrió semejante nombre, o sea ¡pequeños y lentos!-. Pero esa noche dimos el todo por el todo, como se dice: lo dejamos todo en la cancha y quedamos "empatados". ¡No lo podíamos creer!... ese empate significó para nosotros toda una Victoria!

Fue allí donde, aún muy chico, comprendí que si das todo, si juegas con el corazón y crees en ti, NO HABRÁ ENEMIGO INVENCIBLE.

Más adelante incursioné en el Baloncesto, también de manera competitiva y a la edad de 15 años fui seleccionado para el equipo de mi Urbanización -El Paso-, esto era un honor ya que ésta era una urbanización de reconocida Tradición Ganadora en ese deporte. Participé en muchos campeonatos.

Luego, muy seguido, comencé con el Bicicross (BMX) deporte en el que llegué a representar a mi Estado MIRANDA. Primero en el Campeonato Nacional 1985, en la categoría de 16 años para Novatos... y también en el Campeonato Nacional de 1986, ya en la categoría 17 años, expertos. Fueron años de muchas competencias, de compartir de triunfos y fracasos, pero siempre allí, en sana Competencia.

Recuerdo que durante ese 1986 de competencias, acompañé a un amigo a buscar a su hermana a la salida de su entrenamiento; ella practicaba Karate.

Creo que a todas las personas (o al menos casi todas) les gusta la idea de saber pelear, saber defenderse. Lo Típico: al principio no me atrevía, y pensaba que ya era muy grande y hasta viejo para eso. Generalmente uno ve tantos niños practicando desde tan chiquitos. Ahora me río al ver que ¡solo tenía 17 años!... Fue allí que me interesó practicar ese arte marcial, me atreví y comencé en mayo de 1986.

Pero las sorpresas que me tenía reservadas 1986 no habían terminado.

El 24 de diciembre, día de Navidad, fui a hacer ejercicio con un grupo de amigos. Siempre procuraba mantenerme entrenando, indiferentemente de la fecha.

Tan solo 5 semanas atrás había estado participando en el Campeonato Nacional de Bicicross en Puerto Ordaz, al sur de Venezuela.

Ya de regreso a casa pasaron unos muchachos en un carro y nos ofrecieron dar un paseo, una vuelta, ya saben, navidad, las calles, las luces, la ciudad. Uno de mis amigos no quiso ir y se quedó.

Ese fue el día en que ocurrió el accidente que marcó mi vida. Perdí mi brazo derecho completamente.

En aquel momento pensé que todo había acabado. Pero No fue así...  por el contrario, ahora era cuando Todo, apenas comenzaba.

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